La piel grasa
Hoy les queremos contar un poco sobre un tipo de piel del que normalmente recibimos muchas preguntas: la piel grasa.
Pero empecemos por lo primero
¿Qué es la piel grasa?
La piel grasa se clasifica como la piel con sobreproducción de aceite. Hay muchos factores que determinan la piel grasa, siendo el principal la genética, pero con muchos otros que influyen, como la dieta, el uso de ciertos medicamento o incluso la deshidratación de la piel, por más contradictorio que suene.
Una de las principales características de este tipo de piel es el brillo extremo, especialmente en la zona T del rostro, aunado a esto una piel grasa es más propensa a poros dilatados y a brotes.
Si aún no te queda muy claro si tienes o no la piel grasa contesta a las preguntas de aquí abajo:
- ¿Poros abiertos particularmente en tu zona T?
- ¿Tienes un brillo durante el día?
- ¿Ves pequeños bultos y protuberancias en tu piel con ciertas luces?
- ¿Tienes que lavarte el pelo muy regularmente? Sobre todo la zona del flequillo
- ¿Sufres con brotes de acné regularmente?
- ¿A pesar “del brillo” tu piel a menudo se ve opaca y deslucida?
Si tu respuesta fue SÍ a dos o más preguntas, sin duda tu piel es grasa.
Pero no te desanimes, hay algunos aspectos positivos de tener una piel grasa. Por ejemplo, este tipo de piel tiende a estar menos arrugada y también envejece a una velocidad más lenta debido al contenido de aceite adicional en la piel.
Por eso no lo veas como un problema, especialmente si tu piel grasa se debe a la genética, no hay forma de que deje de ser grasa, así que es momento de abrazar tu brillo y aprender a equilibrarlo, no eliminarlo. En otras palabras, en lugar de combatirla, hay que aprender a trabajar con ella.
Aquí algunos tips que mejorarán la relación con tu tipo de piel:
Limpieza
TODAS las personas deberían lavarse la cara mañana y noche, pero es especialmente importante que las personas con piel grasa lo hagan religiosamente, sobre todo cada mañana ya que la suciedad, el exceso de aceites y las impurezas se han acumulado en la piel por la noche.
Lo sé, sobre todo si te lavaste la piel la noche anterior es probable que pienses que no es necesario, pero lo es. La suciedad y el aceite estancado alrededor de los poros, crean una acumulación que pueden obstruirlos y volverlos propensos a acumular bacterias, la fórmula perfecta para un brote de acné.
Exfoliación regular
La piel grasa es especialmente propensa a la acumulación de células muertas, puntos negros y poros obstruidos. Además, la contaminación del entorno puede hacer que la superficie de la piel se vuelva opaca, áspera o desigual.
Para evitar los poros obstruidos y la piel áspera, es importante que exfolie su piel regularmente (2-3 veces por semana) con un exfoliante suave.
Los exfoliantes químicos, como los AHA y BHA, son excelentes para fomentar la renovación celular, ayudar a aclarar las manchas oscuras y agregar luminosidad a la piel opaca, mientras que los exfoliantes físicos ayudan a refinar la textura de la piel.
Ninguno es mejor que el otro, solo es cuestión de gustos así que si tienes la oportunidad te invito a probar las dos opciones con el fin de encontrar tu exfoliante ideal.
Hidrata SIEMPRE
Hay una creencia popular que ha pasado de voz en voz “si tienes la piel grasa no uses humectante”, lamento decirles que es la mentira más grande del mundo. Una piel grasa deshidratada terminará generando más grasa para compensar la humedad del rostro y más grasa es igual a poros obstruidos y acné.
Es importante utilizar humectantes especializados para tu tipo de piel, para evitar la sensación pesada en tu rostro, prueba los humectantes tipo gel o a base de agua, evita los base aceite.
Si tu piel además de grasa es sensible o se encuentra irritada, busca humectantes con propiedades calmantes (aquellos con la leyenda cica, o ingredientes como el aloe o la centella asiática) para aliviar las irritaciones.
Tips extras
- Los productos que contienen retinol ayudan a mantener los poros limpios y la piel brillante.
- Si acostumbras maquillarte utiliza bases matificantes y nunca te brinques el primer porque es super importante para proteger tus poros del contacto directo con la base.
- SPF siempre, aunque no salgas de casa.
- No te revientes los granitos, porque podrías dejar marcas, utiliza spot treatments.
- La doble limpieza es tu aliada num. 1, incorpórala a tu rutina.
Añade un comentario